top of page

Por el buen periodismo



Muy aleccionadores y refrescantes resultaron dos conversatorios que este fin de semana pudimos observar, durante el “Hay Festival” de Cartagena, sobre el buen periodismo. Sobre todo, en un momento de su ejercicio tan crítico y degradante en Colombia.


Paradójicamente las charlas se titulaban: “Imagina Democracia” y “Periodismo versus Desinformación” pero antes que comenzaran se exhibió un mensaje en la pantalla gigante del escenario que decía: “…Este evento hace parte de los proyectos y programas del gobierno nacional y se encuentra financiado con recursos públicos. Los asistentes deben abstenerse de cualquier acto proselitista o incompatible en cualquier sentido con las disposiciones legales aplicables a este tipo de eventos…”. Lo más antidemocrático. Este solo anuncio daba para una columna furibunda de cualquiera de los invitados, acérrimos defensores de la libertad de expresión.



Los protagonistas fueron de primera: Como moderadores Jaime Abello, cofundador y director por mas de 20 años de la Fundación Gabo, y Yolanda Ruiz, periodista que siempre ha propugnado por el rigor, el contexto, la investigación y la contrastación de las fuentes como base del buen periodismo y que hoy es corresponsable del Consultorio Ético de la Fundación; Daniel Coronell, paradigma del periodismo de investigación; Daniel Samper, padre e hijo, que mezclan magistralmente, con diferentes enfoques generacionales, la opinión, el humor, la sátira, la crítica y la ironía; Juanita León directora de uno de los proyectos digitales independientes más exitosos en el país como lo es La Silla Vacía; Al lado de ellos la revelación de los columnistas de opinión: Ana Bejarano que, además, agrega la cuota de juventud y de genero al grupo de www.losdanieles.com; Y Jean-François Foge, asesor con una gran experiencia en medios de Europa y América Latina y además destacado integrante del equipo pedagógico de la escuela de periodismo de la Fundación Gabo.


Que edificante fue escuchar a periodistas reivindicando en este conversatorio las bases teóricas y los fundamentos prácticos del buen periodismo. Recordaron por ejemplo que el apropiado manejo del idioma, el pensamiento crítico, la ética y el conocimiento de la historia son apenas algunos insumos básicos, que al lado de la moderna tecnología y la necesaria interdisciplinariedad del ejercicio del periodismo con otras materias y conocimientos científicos son necesarios para ejercer este oficio. Y que ya no hay necesidad de ampararse en un gran medio para obtener credibilidad. Es una nueva especie de “Periodismo de autor”.


Por supuesto que se tocaron temas tan importantes para la labor como el del irrenunciable papel de contrapoder, el reto de no caer en la trampa del gobierno de los likes, la sofisticación de los mecanismos para persuadir o constreñir al periodista desde regalos e invitaciones y asignación de cuñas de las agencias de comunicación oficiales hasta los ataques de las denominadas “bodegas” y otras estrategias a través de las redes sociales. De tal suerte que al periodista le compete la “carga de la prueba “sobre lo que dice o escribe.


Todo ello en medio de un entorno donde ha fracasado la democracia y casi que ha desaparecido la ética. Y de ese entorno desafortunadamente también hacen parte muchos periodistas.


Otros temas fueron el de la diversidad de las audiencias, la desinformación, las falsas noticias, los “periodistas ciudadanos” o de celular, etc.


Finalmente, un asunto preocupante que tiene que ver con la financiación de este tipo de proyectos periodísticos independientes a través de un mecanismo que no implique la entrega a los poderosos. Porque como decía ese maestro de este noble pero peligroso oficio Ernesto McCausland: “…El periodista debe estar cerca del poder, pero lejos de sus intereses…”


@vherreram

bottom of page