Por: José A. Arias A.
Durante todo el mes de agosto se conmemoró “El Día Mundial del Peatón”, con una cifra que en cualquier civilización produce escalofrío: En Colombia fallecen en promedio 5 peatones al día en accidentes viales, reveló la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), que lanzó la campaña ‘Somos frágiles en la vía’, otra de las tantas iniciativas con las que se busca el respeto por los peatones y “reconocer su vulnerabilidad en la vía”. La ANSV reveló que, en los primeros siete meses de este año, 995 peatones perdieron la vida en accidentes de tránsito, una cifra que es toda “una salvajada” y demuestra la poca importancia que tiene la vida de las personas en este país.
La ANSV explica que “más del 56 % de los peatones fallecidos eran personas mayores de 60 años”, lo que evidencia una doble vulnerabilidad: Ser peatón y pertenecer a un grupo etario que enfrenta mayores riesgos en las vías, lo cual es una palpable demostración de la victimización de este grupo, que además tiene todas las carencias de empleos dignos y derechos como a una pensión vitalicia –no de auxilios politiqueros–, a la salud, a un techo y a las mejores condiciones de las que gozan en muchos países del mundo. La directora general de la ANSV, Mariantonia Tabares Pulgarín, afirmó: “Seguimos acompañando a las autoridades de tránsito del país porque estamos convencidos de que si vamos en la misma línea lograremos salvar más vidas en las vías”, cuya tarea debe ser con el concurso de toda la sociedad.
Según la Contraloría General, Colombia alcanzó la cifra más alta de siniestros viales del siglo, señalando que entre 2022 y 2023, el índice de muertes por accidente de tránsito aumentó de manera preocupante, y calificó estos como “un problema prioritario de salud pública en el país”. En ese período se tuvieron los registros más altos del siglo XXI en cuanto a accidentes de tránsito, superando las 8600 víctimas. Ocupa el octavo lugar en motivo de muerte en la población, el quinto para hombres y en el caso de las mujeres, es el primer motivo de muerte violenta. Agrega que en 2023 fallecieron 535 niños y adolescentes en accidentes de tránsito, siendo la única causa de muerte violenta con variación creciente (9 %) respecto al 2022; pues los homicidios, suicidios y otros eventos decrecieron en este grupo poblacional. Reveló también que aumentaron las atenciones de víctimas en 2022 en salud, incapacidad permanente, transporte, muerte y gastos funerarios, todo ello con un monto superior a $2,7 billones.
La Contraloría afirma que la actual política pública de seguridad vial tiene por meta “reducir las muertes y lesiones causadas por siniestros viales por lo menos en un 50 % para el 2030”. Sin embargo, en 2022 y 2023, la meta de reducción de personas fallecidas en siniestros viales por año estaba definida en 7015 y 6675 respectivamente; pero la realidad, según los datos del Observatorio Nacional de Seguridad Vial, es que hubo 8469 y 8546 personas fallecidas en accidentes de tránsito para estos períodos, respectivamente. Para 2024 está determinada una meta de reducción a 6371 personas fallecidas, pero hasta el mes de julio van 4545, con un promedio mensual de 649 víctimas, lo que pondría al final del año una cifra entre 7500 y 8000 muertes; esto, si no media un trabajo muy intenso de concientización con los actores de las vías, además de controles de velocidad, señales claras y adecuación de las vías. ¡En Colombia, potencia mundial de la vida… la vida es lo que menos vale!
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