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Inflación sería del 7,1% y desempleo estaría en 11,9% en 2022



El equipo técnico del Banco de la República dio a conocer el Informe de Política Monetaria correspondiente al mes de abril de 2022. En el documento se evidencia que, como lo había anunciado el gerente del BanRep, Leonardo Villar, el pronóstico de crecimiento de la economía colombiana para 2022 se revisó al alza.


El equipo técnico también elevó sus previsiones sobre inflación para 2022 y 2023.


Producto Interno Bruto 2022


El equipo técnico del banco central colombiano elevó su previsión de crecimiento de la economía colombiana para este año.



“Frente al Informe de enero, el índice de seguimiento a la economía (ISE) de enero y febrero sugiere que el nivel del producto del primer trimestre alcanzaría registros superiores a los estimados y que el choque de demanda positivo observado al final de 2021 podría estar desvaneciéndose más lentamente de lo anticipado. En el caso particular del consumo, las importaciones de bienes de este tipo, las cifras de comercio al por menor, los ingresos reales de restaurantes y hoteles, y las compras con tarjeta de crédito indican que el gasto de los hogares sigue dinámico, con niveles similares a los registrados a finales de 2021. Las cifras de lanzamientos e iniciaciones de obras y las importaciones de bienes de capital sugieren que la inversión se seguiría recuperando, pero mantendría valores inferiores a los de prepandemia. Para lo que resta del año se espera que el consumo se desacelere desde los altos niveles alcanzados en los últimos dos trimestres en el entorno de unas condiciones financieras internas y externas menos holgadas, agotamiento del efecto de demanda represada y deterioro del ingreso disponible debido al aumento de la inflación”, señaló el grupo de expertos.


Prevén que un crecimiento económico del 7,2% (antes 5,2%) para el primer trimestre y del 5% (antes 4,3%) para todo 2022. En 2023 el crecimiento del producto continuaría moderándose (2,9%, antes 3,1%), convergiendo a tasas cercanas a las de largo plazo. Las nuevas estimaciones sugieren que, en el horizonte de pronóstico, la brecha del producto se mantendría en niveles cercanos a cero, pero más cerrada que lo proyectado en enero.


El equipo técnico manifestó que estos pronósticos de actividad económica continúan enfrentando niveles altos de incertidumbre asociados con las tensiones geopolíticas y las condiciones del financiamiento externo, la incertidumbre propia del ciclo electoral y la evolución de la pandemia.



Inflación 2022 y 2023


En el informe se resalta que el pronóstico y las expectativas de inflación aumentaron y se mantienen por encima de la meta como consecuencia, en parte, de unas presiones externas (precios y costos) más persistentes de lo estimado en el Informe de enero.


Añade que “la invasión de Rusia a Ucrania ha intensificado estas presiones alcistas, en particular sobre los precios internacionales de algunos bienes e insumos agrícolas, la energía y el petróleo. Así, la nueva proyección de la inflación supone unos precios internacionales de alimentos que aumentarían hasta mediados de año y que se mantendrían altos y relativamente estables en el resto de 2022. Supone, asimismo, una recuperación menos dinámica de la oferta de alimentos perecederos como resultado de los altos precios de los insumos agrícolas. También, que los precios del petróleo empiecen a ceder desde el segundo semestre del presente año, pero desde valores superiores a los considerados en el Informe anterior. Frente al mismo, una senda proyectada de inflación más alta podría acentuar la indexación y elevar las expectativas de inflación. Adicionalmente, la reversión de la rebaja del impuesto al valor agregado (IVA) aplicada a productos de aseo e higiene por cuenta del vencimiento de la emergencia sanitaria generaría aumentos en los precios de estos bienes”.


A todo esto, según el reporte, se suma la ausencia de excesos de capacidad productiva en el horizonte de pronóstico, con niveles de brecha de producto cercanos a cero y algo más altos de lo proyectado en enero pasado.


Así, de acuerdo con el equipo de expertos del Emisor, hasta junio la inflación anual continuaría en niveles altos similares a los actuales, para luego descender, aunque de una forma más lenta que la proyectada en el informe anterior.


Señalan que “el proceso de ajuste de la tasa de interés de política monetaria contribuiría a que la inflación y sus expectativas retomen su convergencia a la meta en el horizonte de pronóstico. Así, al finalizar 2022 la inflación terminaría alrededor del 7,1% para luego descender al 4,8% en 2023”.


Hay que recordar que en el informe de enero de este año se proyectaba que la inflación cerraría 2022 en 4,3% y en 2023 en 3,4%.



Proyecciones sobre petróleo


En el informe se revisó al alza el pronóstico sobre precios de petróleo para 2022 y 2023.


“En los últimos meses el precio del petróleo ha mostrado alta volatilidad y ha sorprendido fuertemente al alza frente a lo esperado en el Informe de enero. Lo anterior, como consecuencia de la invasión rusa a Ucrania y su impacto sobre la oferta de petróleo, dado que Rusia es un productor importante de crudo, gas natural y carbón en el mundo. Además, la OPEP+ ha presentado dificultades para incrementar su extracción y cumplir con sus cuotas, y mantendría recortes en su producción durante buena parte del año. Por su parte, a pesar de los altos precios, otros países como los Estados Unidos presentan rezagos en las inversiones y en el aumento de la producción. Por el lado de la demanda, en 2022 el PIB mundial seguiría expandiéndose en un entorno de bajos inventarios, generando presiones adicionales sobre los precios. No obstante, las revisiones a la baja del crecimiento global, los confinamientos de parte de la población en China por los rebrotes del virus y los altos precios del crudo moderarían su demanda, lo cual, sumado al aumento esperado de la producción en países diferentes a Rusia y los compromisos de liberación de reservas estratégicas por parte de los Estados Unidos y otros miembros de la Agencia Internacional de Energía, contribuiría a mitigar parcialmente las presiones sobre los precios a lo largo del horizonte de pronóstico”, señala el documento.


Así las cosas, se supone que la cotización del petróleo Brent se ubicaría en promedio cerca de US$101 por barril (bl) en 2022 y de US$87 bl en 2023. Esto representa una fuerte revisión al alza frente a lo presentado en el Informe anterior (US$75,3 bl para 2022 y USD 71,2 bl para 2023).


Desempleo


El informe señala que debido a las mejores previsiones de actividad económicas contempladas y el mayor ritmo de recuperación del mercado laboral, se estima que la tasa de desempleo nacional continúe descendiendo.


En los últimos meses la ocupación ha tenido un ritmo de recuperación mayor del considerado en informes pasados, dada la mejor dinámica en la creación de empleo tanto de las zonas urbanas como de las otras cabeceras y áreas rurales, así como por un mayor protagonismo del empleo asalariado. Por el lado de la oferta, los resultados de la Gran encuesta integrada de hogares (GEIH), Marco 2018 del DANE, muestra un crecimiento moderado de la población por fuera de la fuerza laboral (inactividad) en las ciudades y reducciones en los municipios intermedios y el área rural, lo que indica una mayor recuperación de la participación laboral en los últimos meses.



“A pesar del crecimiento de la participación laboral, el mayor dinamismo en la creación de empleo permitió una caída importante en la tasa de desempleo desestacionalizada (TD), principalmente en el agregado urbano. A partir de la dinámica reciente y del escenario macroeconómico contemplado en este Informe, el equipo técnico estima que la TD nacional continuaría disminuyendo lentamente y su nivel promedio para todo 2022 se ubicaría entre el 10,0% y el 11,9%, con valor más probable del 10,9% (estimaciones inferiores a las presentadas en el Informe de enero: 11,7%). En el caso de las zonas urbanas se estima que la TD se ubicaría en promedio en 11,2%, dentro de un rango del 10,2% y 12,2%. Lo anterior sugeriría una brecha de desempleo urbana que sería menor frente a la estimada en el reporte anterior, lo que implicaría un mercado laboral que en 2022 estaría menos holgado”, señala el documento. DATAIFX

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