Al menos 80 senadores (de 108) acudieron el martes a la sesión atípica citada por el Congreso, durante esta Semana Santa, para continuar la discusión de la reforma pensional propuesta por el Gobierno, la iniciativa que genera menos resistencia entre los legisladores frente a las demás reformas presentadas por el Ejecutivo.
La sesión permitió el debate a expertos, sindicalistas y académicos, quienes plantearon a la plenaria del Senado una serie de argumentos, en favor y en contra, frente a la reforma propuesta por el Gobierno.
“La reforma es urgente, no solo por temas de sostenibilidad, sino de justicia, entre más nos demoremos en aprobar una reforma pensional, prolongaremos más esas injusticias”, afirmó Oliver Pardo del Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana, durante su intervención.
La reforma propuesta por el Gobierno se basa en un sistema de pilares (cuatro en total), que entre otras abre un espacio para que los adultos mayores sin pensión reciban una renta mensual, mientras que los afiliados podrían cotizar entre uno a tres salarios mínimos en Colpensiones (estatal) y en adelante los recursos serían administrados por los fondo privados, entre otras características.
“Hay un consenso en que hay que transitar al sistema de pilares y en este sistema la propuesta del Gobierno son cuatro pilares, hay algunos reparos en la configuración de los mismos, pero en términos generales, pienso que Colombia, va avanzando en el camino de que se haga una reforma pensional como la que estamos planteando”, afirmó la ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez.
En la actualidad hay un evidente desequilibrio en el tema pensional, puesto que los fondos privados tienen 19 millones de afiliados y solo han pensionado a 318 personas, mientras que Colpensiones posee 6,8 millones de afiliados y tiene más de 2 millones de pensionados.
La presencia este martes atípico de 80 senadores fue un buen termómetro para medir el interés de las diferentes bancadas en el tema y aunque no hay consenso mayoritario, si persiste un ánimo de discusión, pese a que los tiempos para la votación se acortan. COLPRENSA