¿Qué implica la decisión de Fajardo y De la Espriella de no ir a Consulta?
- Acta Diurna

- hace 17 horas
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A contrapelo de la tendencia que ha definido las últimas justas presidenciales en Colombia, dos de los candidatos mejor posicionados en las encuestas, Sergio Fajardo y Abelardo De la Espriella, han tomado una decisión que redefine el panorama político: saltarse las consultas interpartidistas de marzo e ir directamente a medirse en la primera vuelta.
Esta movida, calificada de radical, implica un reacomodo en el mapa electoral. Detrás de estas estrategias, cuyo desenlace es incierto, se cierne la amenaza de la fragmentación de votos, un viraje en la tradicional conformación de bloques y, potencialmente, una pérdida de visibilidad crucial para sumar apoyos de cara a 2026.
La decisión ha impactado con especial dureza los esfuerzos por la unidad de los sectores de centro-derecha, chocando frontalmente con la propuesta, semanas atrás, del expresidente Álvaro Uribe Vélez, jefe máximo del Centro Democrático, quien buscaba una gran coalición "desde Fajardo hasta De la Espriella", un proyecto que hoy se desvanece.
También supone un revés para los coqueteos desde la coalición liderada por figuras como David Luna, Mauricio Cárdenas y Juan Manuel Galán.
No obstante, para Fajardo, esquivar la consulta (que coincide con las elecciones al Congreso) podría ser una lección de su experiencia en 2022. En esa ocasión, la coalición Centro-Esperanza terminó en controversia, con la aceptación de apoyos polémicos y la posterior dispersión de votos.
El camino en solitario
La inscripción de firmas y los discursos de ambos líderes confirman su ruta individual, distanciándose de la dinámica de coalición.
Abelardo de la Espriella inscribió 4.6 millones de firmas. "No voy a la consulta de marzo, pero estoy abierto a la unidad", aunque esta postura habría generado molestia en el círculo de Uribe.
Sergio Fajardo, por su parte, anunció un camino en solitario. Su meta es "construir una nueva mayoría", dejando de lado los extremos y reivindicando el centro. Citó la fatiga ciudadana: "Colombia está mamada de la polarización".







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