Después de al menos tres intentos fallidos, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) entrevistó a Dairo Antonio Úsuga alias “Otoniel”, exjefe del Clan del Golfo. El encuentro fue este miércoles y en sus declaraciones sobre los falsos positivos en Casanare, el narcoparamilitar mencionó a altos mandos del Ejército con los cuales llegó a colaborar.
“Otoniel” fue parte del Bloque Centauros de las AUC durante más de cuatro años, por lo que sus declaraciones esclarecen la muerte de miles de campesinos que fueron asesinados entre los años 2005 y 2008.
La audiencia, que inició a las 10 de la mañana y duró dos horas y media, contó con las garantías establecidas por la JEP, donde la Policía se comprometía a resguardar la información que “Otoniel” entregara.
Esto, luego de que este martes, la JEP suspendiera la entrevista de “Otoniel” por interrupciones de la Policía cuando estaba dando su versión y apesar de las reiteradas solicitudes de la JEP a la Policía que incluyen un auto expedido el 10 de marzo en el que ordena al director de la Dijín, Mayor General Fernando Murillo Orrego a “que se abstenga de realizar actuaciones que afecten la reserva de las diligencias judiciales con la presencia de personal uniformado o ajeno al convocado” en las audiencias.
En sus declaraciones, Úsuga señaló que durante su militancia con las AUC varios generales y comandantes del Ejército habrían tenido nexos con el paramilitarismo para beneficio propio. Entre ellos se encuentra el general (r) Leonardo Barrero, quien fue comandante por algunos años.
Según “Otoniel”, Barrero servía como puente entre estructuras dedicadas al narcotráfico y el Ejército, por lo que era considerado como “parte de la nómina del Bloque Centauros”. Así mismo, lo señaló de ser una “ficha clave” para lograr el control territorial en el Casanare.
El exjefe paramilitar apuntó que los pagos que realizaban las autodefensas a sus aliados eran muy altos, por lo que muchos de los altos mandos militares que se encontraban en Bogotá aceptaban de forma constante sumas hasta por 250 millones de pesos, dinero que ayudaba a que no interfirieran en las labores que realizaban.
También mencionó al exdirector del DAS en el departamento de Casanare, Orlando Rivas, y al general (r) Henry Torres Escalante, quien fue comandante de la Brigada XVI del Ejército, como aliados de las AUC, los cuales recibían grandes cantidades de dinero para no interferir o delatar las masacres que ocurrían en la zona.
En la audiencia, el procesado también habló de los falsos positivos en el Casanare. Se espera que el próximo 29 de marzo el excabecilla del Clan del Golfo hable sobre las muertes ocurridas en Dabeiba y el departamento del Meta. El próximo 29 de marzo, a partir de las 8 de la mañana, “Otoniel” volverá a declarar ante la JEP. COLPRENSA